Se Buscan Autores

Para todos aquellos que les guste escribir todo tipo de historias con todo tipo de contenidos, éste es su lugar: Dark Business.

Así que, si te interesa publicar en el blog tus historias, escríbeme a: KeiraLogan@gmail.com y estaré encantada de incluíros como autores.

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Bienvenidos a Dark Business

Bienvenidos a Dark Business, un blog donde podréis encontrar fanfics variados de autores diferentes.

Espero que os gusten, de verdad...

Es IMPORTANTE leer las presentaciones de los autores para saber, más o menos, su método de trabajo.

Para dudas y sugerencias que no entren en el tag (asi como peticiones para unirse al blog) mandad un email aquí: KeiraLogan@gmail.com

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¡Gracias por leer!


Pausa general

Llevo bastante tiempo pensando, negando lo evidente, pero creo que es una gran estupidez seguir negándolo. Abrí este blog con el fin de pasar el rato, de postear mis fanfics, y después para darle una oportunidad de publicar a otros autores. Pero llevo ya mucho tiempo dejando todo esto de lado, y la mayor parte de los demás autores (por no decir todos) pasan absolutamente de este blog. Así que no me queda más remedio que hacer lo siguiente:

Este blog queda parado. No se volverá a publicar absolutamente nada (al menos mío) en una temporada.

Disculpad las molestias.

Kyara.

P.D: quizás acabe dejando este blog solo para mis publicaciones y para nadie más.

viernes, 22 de mayo de 2009

La ardilla que olvido morir Cáp.2

Cap. 2 Pesadilla

Los primeros rayos del sol caen en mis ojos y comienzan a fastidiarme... Me levanto y me estiro.

- Veo que ya te levantaste - Me dijo sarcástico Nao.
- ¿Que tienes? Aún es temprano- le dije
- Oigan, ¿Han visto a Hiroto?- Preguntó Shou subiéndose la bragueta de su pantalón.
- No...- Respondió Nao.
- De repente se fue a mear por ahí- Le dije cruzándome de brazos- Ese mocoso siempre trae problemas . ¡Es lo único que sabe hacer!
- Oye relájate ... - trató de calmarme Shou.
- Espera... Él no es así, y... ya hace mucho tiempo que se fue... - Dijo Nao- tal vez se perdió. Lo mejor que podemos hacer ahora es buscarlo - Anunció muy preocupado.

Yo también me sentía muy preocupado... Pero, no me gustaba mostrar mis sentimientos ni nada de eso... Ogata es aún un niño... todo le puede suceder... Romperse una pierna, caerse de un barranco, ser atacado por los lobos... o ... algo peor...

- Tora, no perdamos el tiempo y comencemos - Dijo muy cerio Nao.
- Si...

Nos dividimos y nos pusimos a rastrear la zona en busca de sus huellas.
La última vez que vimos a Hirotto, estaba acurrucado en mi ... y luego... ¡Maldición! Y si se levantó en la noche... ¡¿Por qué no lo sentí!?..

- ¡Chicos!¡Vengan por aquí!¡Encontré pistas!- gritó Shou.

Nao y yo lo seguimos ... y nos dimos cuenta de lo peor...

- ¡¡Por Kami-sama!! ¡¡esto apesta a alcohol!! - Comento Shou.
- Esto es de Ogatta - agregó Nao levantando una zapatilla .
Todo estaba lleno de botellas bacías, y marcas de pisadas, que se alejaban de la zona.
- Sigamos el rastro antes de que se desvanezca - Dije furioso.

Si esas personas llegan ha hacerle algo a Hirotto; juro que se arrepentirán.

*Hiroto Ogatta*

- ¡Levántate!- Gritó alguien pateándome.
- Auch!...- Me quejé de dolor.

Observé mi alrededor. Me encontraba en una vieja cabaña. A mi alrededor, sobre sillas y muebles se encontraban los que me habían raptado, observándome con miradas llenas de lujuria. En cambio yo, me encontraba tirado en el suelo adolorido... No sabía que decir, y menos que hacer ... Solo ... Sólo quería llorar , y despertar de eta pesadilla...

- Bueno, ya que no piensas decir nada.... - Decía uno alto de ojos castaños- Te diré algunas cosas. Aunque grites, nadie te oirá; ya que estamos muy lejos , mas lejos de lo que te imaginas del lugar en donde te encontramos...
- Y por si no lo has notado, ¿Por que no te miras el tobillo?- Intervino uno rubio mas bajo, con aspecto de Yakuza .

Me miré el tobillo, para descubrir que tenia una especie de brazalete metálico adherido a mi piel. Sin pensarlo dos veces intenté quitármelo, pero todo mi esfuerzo fue en vano.

-sabemos que eres guitarrista... y que eres "famoso", y ese brazalete impedirá que te puedas escapar de aquí- añadió el mismo sujeto. Acto seguido echó a reír a carcajadas. Como si lo que hubiera dicho fuera gracioso.
- Por favor, déjenme regresar. Yo no les he echo nada.. Por favor. - me puse a llorar.
- Te ves tan lindo cuando lloras - Se me acercó otro chico, y me cogió fuertemente de la cara- ¡anda! sigue llorando...
- ¡Ya!... déjalo, lo único que estas logrando ; es que se asuste ates de tiempo... - intervino otro.

Este tenia aspecto más formidable y respetable, pero se notaba que era demasiado adulto.
No podía aguantar más... Tenia miedo. Todos tenían sus miradas posadas en mí... y me incomodaba más , el simple echo ; de que aún tenia ganas de orinar..
El brazalete ya me estaba hartando. Aunque ya tenia asumido que ya formaba parte de mi; seguía intentando arrancámelo.

- ¿que es lo que tienes en el cerebro? - Se burló sarcásticamente otro chico- Si sigues de ese modo; lo único que estarás consiguiendo es que me excite - Me intimidó un pelirrojo.
-¡¿No han entendido lo que dije!? ¡No jodan más al niño!- Me defendió el mas adulto de todos... Nuevamente- ¡Levantate y dinos tu nombre!
- hi..hiro... Hirotto Ogatta..
-Que lindo.. -Dijo el adulto lujuriosamente.
-Muy bien "ogatta", basta de palabrerías, y quítate de una buena vez la ropa- dijo uno de muchos pearcings.

Apenas dijo eso, me puse de pie para tratar de escapar, pero , instantáneamente me arrodillé en el suelo otra vez. No tenía caso. Tenía medo, estos señores iban a abusar de mi... Y... Ya no soportaba las ganas... M estaba aguantando desde ayer... Mas el pánico que tengo ahora; aumenta mi necesidad.

- Ven ... acercate y siéntate en mi muslo- Me llamó otro chico como de veintidós años, de cabello largo y castaño.

Lo miré con temor ... e hice lo que me ordenó...

- Que buenito te pones ahora- Añadió otro adulto... Más feo.. y gordo

- Si intentas escapar, o de hacer algún movimiento que ya sabes que te costará la vida; lo lamentarás ¿Entendido?- Me susurró el señor que me cargaba al oído. Solo asentí con a cabeza- Así me gusta ... Ahora aborrecerás a todo lo que cada uno de nosotros te digamos ¿Entendido?- Me empezaron a salir nuevas lágrimas silenciosas de los ojos... Volví a asentir con la cabeza- Listo señores, ahora dejemos que el pequeño elija con quién quiere comenzar- Anunció.
- Te debes sentir alagado- Se burló otro señor de piel muy oscura- Eres tan bonito que podrás elegir con quien quieres comenzar...
- ¿co...comenzar q... que?- Pregunté aún con las lágrimas . Tenia en mente algo... pero tenia fe en que no fuese eso... por favor...
- ¿No sabes que?- El rubio juntó su cara con la mía- comenzar el sentido de tu secuestro. No queremos dinero de ti. Ya tenemos suficiente de eso, ahora lo que realmente deseamos , es a una hermosa criatura; para convertirla en nuestro juguete sexual... Es lo único que nos falta. O mejor dicho; que nos faltaba. Ahora ya te tenemos... Y ahora sí, tienes que elegir con quien quieres tener tu primer encuentro sexual... o ¿Ya has echo el amor con otro tío? - Negué con la cabeza.
- Apúrate en elegir al primero, y no te preocupes por los que siguen después, ya que nosotros la vamos a regir. - dijo el más gordo.
- Solo cerré mis ojos y señale... No sé a quién … Pero señalé...
- Te arrepentirás de no haberme escogido... - Se enfadó el rubio.

Sin querer había escogido a uno de los mas grandes. Su piel era clara , sus ojos oscuros,m con una larga melena oscura. Me llamó la atención el pearcing que llevaba al lado derecho del labio... como personas con semejante “belleza” me tenían que usar...

- Vamos precioso- Me jaló de la mano con brusquedad, y me condujo hasta una habitación en la parte trasera de la cabaña.

-¡Maldición! - Me quejé- llevamos horas siguiendo las huellas …
- Tora tiene razón Nao, nos tomaron ventaja con su camioneta... - Dijo mirando las nuevas marcas que había dejado el vehículo en el sendero del bosque.
- Si... si seguimos corriendo de este modo... Seguro que llegaremos en días. Y eso... no sabemos hasta donde habrán llevado a Hiroto... Y menos sabemos si es que él sigue vivo...
- ¡Cállate idiota! ¡él esta vivo!- Grité lleno de furia.
- ¡¿qué te hace pensar que no está muerto!? - gritó Nao.
- Lo sé... Él es mi amigo y lo peor que puedo hacer ahora ; es pensar negativamente de él... Ogatta esta vivo...- Dije...
- Eh... muchachos.. si nos quedamos parados acá; no llegaremos a ningún lado- Rompió el silencio Shou.
- Si- Dijo Nao- Tora... En verdad lo siento. A veces la desesperación y esto....
- Es mejor cuidar lo que decimos... Hasta en estas situaciones de desesperación...- le dije- Sigamos adelante...
- de acuerdo... - respondieron.

*Hiroto Ogatta*

Si intentaba zafarme del señor … solo empeoraría las cosas más de las que ya estaban. Este lugar está repleto de armas... Y aunque tratase de coger una pistola, y matase a este señor , vendrían los demás y acabarían con migo. Claro, y antes... me violarían...
El adulto cerró la puerta con llave... Y se dirigió hacia unos cajones de una cómoda; para... para sacra cadenas.
Mientras lo hacia me hablaba.

- puedes llamarme Aoi... siempre esta bien que tengas un nombre por el cual gemir...
Me puse a llorar...
- Quítate la ropa...- Dijo mientras que él se sacaba la suya.- No, mejor no – retiró su mandato- Yo te la quitaré...

El tal Aoi me agarró por la cintura, y antes de comenzar; me secó las lágrimas
Si te quedas quieto, y no te pones rebelde, no te dolerá tanto- Dijo mientras me quitaba la camisa. Acto seguido, empezó a acariciar mi pecho. Luego desabrochó mi pantalón, y me desnudó por completo.
Me echó en la cama tratando de ser delicado; y de no poner todo su peso sobre mi. Agarró las cadenas; que a la vez contenían dos pares de esposas y me sujetó de las muñecas y de los pies hacia ambos extremos de la cama.

-Por favor... No, no... no lo haga...- Sollocé.

Aoi se quitó su ropa interior, mostrándome lo grande y erecta que la tenia.; para luego empezar a masturbarme con fuerza.
Grité de dolor y de miedo. Todavía no me la había metido; peor me estaba apretando los genitales con demasiada fuerza... Y me dolía...

- Ahora sí, pequeño, quedate quieto... - Agarró mis piernas y las abrió con fuerza; haciendo que las cadenas me quedasen más apretadas por la presión- Primero introduciré un dedo, luego dos, después tres, y dejaré para el final la mejor parte.

Mis lágrimas volvían ha salir silenciosas... Y de mis labios sólo pude susurrar “Tora... Te quiero...”

*Tora*

Puedo sentirme más inquieto, y no por que esté corriendo con todas mis fuerzas, si no … siento que si no me apuro; algo le puede suceder a Hirotto. Tengo el presentimiento de que no está muerto... Pero si no lo encuentro lo más rápido posible... Ya no sé que pensar... Cada segundo, cada minuto... Se vuelve eternidad... No quiero lamentarme lo que le puede suceder... Sólo quiero traerlo de vuelta con el grupo... Para protegerlo...Él no tiene la culpa de lo que está sucediendo... Tal vez la tenga yo, por no haberlo cuidado correctamente... ¡¡Matare a esos secuestradores!

Continuará...